martes, 6 de marzo de 2012

Random thoughts XVII: Ella pitaba (Cuento Corto)

Lo sintió, lo pensó y lo gritó. Sus manos temblaban de frío. O de nervios, no lo sé. Silenciosamente tomó un cigarrillo y lo encendió. Ella siempre con cada pitada pretendía acabar con un problema, un pensamiento, un amor,  todo aquello que la atormentaba, sin saber que a la larga cada pitada era una apuñalada a su corazón, que cada pitada, en definitiva, no mataba a sus pensamientos sino a ella misma. Pitaba, su corazón se agitaba, las lágrimas recorrían su rostro corriendo el rímel. Pitaba. Sin descanso. Acelerado. El pulso, sus manos. Sus manos.  Frágiles, lastimadas por el viento y el tiempo. Miró a su reloj. Marcaba las tres. Ella pitaba. Su cabello, oscuro y lacio, brillaba por el sol.  Seguía pitando. El humo formaba un camino con sus cenizas. Se levantó y lo siguió. Le costaba caminar, con esfuerzo seguía ese camino sinuoso. Mientras tanto, pitaba. Sonreía. Se reía a carcajadas, hacía tiempo que no estaba tan feliz. Siguió pitando. Danzaba, hacía su ritual con su cigarrillo en mano. Miró su reloj. Las tres y diez. Luego todo silencio. El humo de su cigarrillo seguía haciendo formas con su ceniza. Sus manos lo hicieron resbalar. El reloj se detuvo. Y su corazón también…

Escrito por Claudio Gómez